martes, 5 de agosto de 2008

See you in another life.





Y entonces llega el momento que uno anduvo retrasando mientras pudo y que a pesar de todo tanto deseaba que llegara, esa última ocasión que se te es ofrecida, sabiendo lo sorprendentemente relativa que puede ser la palabra última.

Dos cortas miradas cortas dando una a otra la iniciativa, un gesto de extremo con todo el sentido que uno no pueda llegar a imaginar o absolutamente carente de él, un tímido acercamiento definitivo, sin marcha atrás, una mano que se extiende desde sí misma hasta alcanzar levemente un hombro que no es mío, Cuidate mucho, espero que tengas mucha suerte, siendo mejor aún que no la necesites, y que todo te vaya muy bien, porque bien lo mereces. Piel con piel los brazos se enlazan menos fríamente en un triste consentimiento de fin del que no podemos estar muy seguros a pesar de todo. Y la pertinente indiferencia porque no suele ocurrir que se componga en un minuto lo que fuiste derribando minuciosamente durante casi un año. Y ahora me ofrecen buenas palabras y palmaditas en la espalda desde afuera, desde donde el auténtico y verdadero remedio sería posible, incluso todavía. Pero no sólo me tratan de convencer de la cantidad de mar y tierra que hay en el mundo, toda ella disponible, esperándome para que yo decida y escoja, cuanta yo quiera. Pero resulta que a mí sólo me interesan esas dos gotas de agua dulce y esos dos granos de arena que se me escaparon de las manos, que se me escurrieron inevitablemente entre los dedos mientras seguía la caída con mis ojos, hasta que mi vista no dio para más. Y no me quedan ya mas que hologramas.

Una historia a la que había que ponerle el broche, una historia a la que habrá que ponerle el broche.

I’ll miss you sweetheart.
See you in another life, sista’.


El Puerto de Santa María, a 5 de Agosto de 2008.

1 comentario:

Maga dijo...

"Pero resulta que a mí sólo me interesan esas dos gotas de agua dulce y esos dos granos de arena que se me escaparon de las manos" ... ¿es acaso una especie de karma?, o ¿ley de vida?...desear aquello que ya no está.
Besos
Adiós.